Los analgésicos y antiinflamatorios son con diferencia los medicamentos más empleados para tratar los dolores sean del tipo que sean, sin embargo un uso prolongado de ellos puede llevar a una saturación del hígado y riñones.
Con el objetivo de reducir el consumo de este tipo de medicamentos hoy vamos a aprender a elaborar una sencilla loción analgésica casera empleando ingredientes naturales.
Para elaborarla vamos a necesitar aceite de oliva, jengibre y pimienta cayena, ya sea entera o en polvo.
1. Coloca en un frasco de vidrio un par de vasos de aceite de oliva, 4 cucharadas de pimienta cayena y un jengibre pequeño rallado o 4 cucharadas de jengibre en polvo (lo que prefieras). Mézcalo bien con ayuda de una cuchara.
2. Caliéntalo al baño maría durante 1 hora y déjalo reposar
hasta que siga caliente pero no queme, momento en el cual podrás empezar a utilizarlo.
Como aplicar:
Masajea las zonas inflamadas y/o doloridas con este aceite mediante suaves masajes circulares. Hazlo durante varios minutos para ayudar a calentar la zona y que el aceite penetre mejor en la piel.
Puedes usarlo más de una vez al día para calmar el dolor y prevenir su aparición. En cuanto al sobrante lo puedes guardar sin problemas en un recipiente de vidrio (cerrado) en un lugar fresco y seco. Puede durar meses sin ningún problema.