Policía ayudaba a sofocar incendio y maleante lo atacó a machetazos

Un cabo primero sufrió una herida en la frente. Socorría a una familia cuya casa se prendía fuego. De la nada, apareció un malviviente. Cuando el agente se agachó para agarrar un balde vio que le tiró un golpe con machete. Su oportuna reacción lo salvó de un peor final.

Un efec­ti­vo de la Po­li­cía de Co­rrien­tes re­sul­tó he­ri­do ayer de un ma­che­ta­zo en la ca­be­za, cuan­do par­ti­ci­pa­ba del au­xi­lio a una fa­mi­lia que su­fría el in­cen­dio de su ca­sa, en la zo­na Sur de la ca­pi­tal pro­vin­cial. Lo agre­dió un de­lin­cuen­te que apa­re­ció de la na­da y des­pués es­ca­pó.

Co­mo con­se­cuen­cia del ata­que, el ca­bo pri­me­ro Ger­mán In­sau­rral­de su­frió una le­sión con­si­de­ra­da co­mo le­ve en la fren­te, la cual de­man­dó al­gu­nos pun­tos de su­tu­ra.

La opor­tu­na re­ac­ción de­fen­si­va del fun­cio­na­rio de se­gu­ri­dad evi­tó que el ar­ma im­pac­ta­ra de lle­no so­bre su crá­ne­o. “Me aga­ché pa­ra aga­rrar un bal­de y veo que me ti­ra un gol­pe con el ma­che­te”, des­li­zó la víc­ti­ma an­te sus su­pe­rio­res.
El ata­can­te se­ría un su­je­to con an­te­ce­den­tes de vio­len­cia que hu­yó de la zo­na y per­ma­ne­cía en ca­li­dad de pró­fu­go.

De acuer­do a in­for­ma­ción re­co­pi­la­da por dia­rio épo­ca, el in­ci­den­te su­ce­dió en in­me­dia­cio­nes a la es­qui­na de ca­lles Las Pie­dras y San­dra Ro­me­ro.
Po­co des­pués de las 4, una vi­vien­da co­men­zó a in­cen­diar­se. In­sau­rral­de y un com­pa­ñe­ro, am­bos con pres­ta­ción de ser­vi­cios en la co­mi­sa­ría sec­cio­nal Oc­ta­va, acu­die­ron a ve­ri­fi­car la emer­gen­cia.

Ape­nas lle­ga­ron y vie­ron el fue­go de­cla­ra­do no du­da­ron en brin­dar ayu­da, mien­tras es­ta­ban en ca­mi­no las au­to­bom­bas de Bom­be­ros Vo­lun­ta­rios y Bom­be­ros de la Po­li­cí­a.
El ca­bo In­sau­rral­de lle­gó has­ta la ca­sa en lla­mas ubi­ca­da al fi­nal de un pa­si­llo y cuan­do bus­ca­ba un bal­de fue agre­di­do en for­ma ve­he­men­te.

Pe­se a re­tro­ce­der, no pu­do es­qui­var uno de los ma­che­ta­zos y fue las­ti­ma­do en la fren­te por el su­je­to que, en cues­tión de unos po­cos se­gun­dos, es­ca­pó co­rrien­do.
Ma­nan­do im­por­tan­te can­ti­dad de san­gre, de­bió ser tras­la­da­do pa­ra re­ci­bir aten­ción mé­di­ca en el Hos­pi­tal Es­cue­la.

Los bom­be­ros, en tan­to, so­fo­ca­ron el in­cen­dio que pro­vo­có im­por­tan­tes da­ños ma­te­ria­les.
Ca­be se­ña­lar que, en abril, In­sau­rral­de tam­bién fue pro­ta­go­nis­ta de una no­ti­cia: jun­to a un ca­ma­ra­da fue quien ayu­dó a una mu­jer a dar a luz a un be­bé en una ca­sa del ba­rrio Vi­lla Chi­qui­ta.

 

 

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