Despellejó 1.100 gatos y vendió su carne para relleno de empanadas

Un keniata fue juzgado y condenado a tres años de cárcel por asesinar felinos y comercializarlos. Fue atrapado por los vecinos mientras mataba a un animal en plena vía pública. LAS IMÁGENES PUEDEN HERIR SU SENSIBILIDAD.

Una particular “oportunidad de negocio” encontró un keniata, en 2012, para ganar dinero, pero su actividad lo llevó a la cárcel.

Se trata de James Mukangi, de 34 años, quien fue atrapado mientras despellejaba gatos en la vía pública para vender su carne para producir alimentos.

El hombre fue descubierto por los propios residentes del poblado de Nakuru, al oeste de la capital de Kenia, Nairobi, mientras le cortaba el cuello a un gato, por lo que la policía intervino para evitar que lo lincharan. Entonces, confesó que inició su actividad en 2012 porque creyó que había encontrado una “oportunidad de negocio”.

 

Desde ese momento, ganó el equivalente a unos 5.000 dólares, ya que mató y vendió más de 1.100 animales a productores de comida de la zona, incluido un hotel. “Siempre hubo una alta demanda de carne de gato que nunca llegué a satisfacer debido a la falta de gatos en mi zona. Fue duro cuando empecé el negocio, pero mi clientela ha crecido”, contó.

Pese a las explicaciones, Mukangi fue juzgado y condenado a tres años de cárcel.