El extranjero, quien cuenta con antecedentes penales por igual delito en su país, captaba a jovencitas de entre 12 y 16 años, para sacarles fotos desnudas y en osadas poses sexuales.
Trascendió que las adolescentes siempre eran de condición social vulnerable, a quienes daba dinero o compraba ropas, a cambio de usarlas como «modelos», para obtener imágenes que luego vendía a una red de consumidores de pornografía infantil.
Le incautaron un auto importado, equipos de almacenamiento audiovisual y otros elementos comprometedores. Ahora se encuentra en la cárcel de San Cayetano, dijeron fuentes del caso a Todo Policiales.
Las menores que cayeron en su red (incluso habría mantenido relaciones íntimas) serían más de veinte.
Fuente: Todo Policiales