El pasado 31 de marzo, recibió un llamado del hospital Garraham en el que le avisaron que ya “estaba su riñón” pero por falta de recursos económicos no pudo ir y perdió así la posibilidad de recibir el trasplante.
Desde el hospital en Buenos Aires, le dieron las indicaciones para que este preparado, para un eventual llamado. Cuando esto suceda deberá viajar con urgencia porque el órgano tiene entre 8 o 9 horas de disponibilidad para el trasplante, previos análisis clínicos y diálisis, reveló su mamá Graciela Quiroz a un medio local.
La comunidad dio una rápida respuesta a la familia del jovencito que este domingo hizo una venta de empanadas para recaudar fondos, y además desde el Municipio, el intendente puso a disposición un vehículo y ayuda económica.