Sucedió en la localidad australiana de Perth, donde una mujer llamada Peta Blackburn denunció que salió a comer con su familia y encontraron un ratón muerto en la comida.
Su esposo, Bruce Blackburn contó que fue al local «The Civic Hotel» de Inglewood y pidió una hamburguesa. Empezó a comerla pero en el tercer bocado notó algo raro.
«El tercer mordisco, en realidad no podía morderlo. Me di cuenta de que había un ratón peludo, hecho y derecho en la carne. Mi reacción fue simplemente dejarlo caer y sentirme mal», relató.
El hombre contó que los dueños del restó, le devolvieron el dinero pero increíblemente no se disculparon.
La mujer de Blackburn hizo una publicación en su cuenta de Facebook para denunciar el desagradable momento.