Perdió un brazo en un combate cuerpo a cuerpo con una pitón gigante

Robert Nababan, un guardia de 37 años, casi muere en su intento de quitar a la enorme serpiente de un camino en Indonesia.

Trabaja como empleado de seguridad en una plantación de aceite de palma. Al concluir su jornada laboral, este martes por la tarde, se subió a su motoneta y emprendió el viaje de regreso a casa, en Indragiri Hulu, provincia de Riau.

Robert Nababan, de 37 años, se detuvo al ver a dos peatones imposibilitados de atravesar una calle. Cuando se bajó, descubrió qué les impedía avanzar: una gigantesca pitón de al menos siete metros de largo bloqueaba completamente el paso.

«Traté de atraparla, pero me mordió el brazo. Estuvimos luchando un rato largo». Eso es lo que alcanzó a contar Nababan desde la cama del hospital al que lo trasladaron después del combate.

Los médicos y los familiares les pidieron a los periodistas que se retiraran, así que el relato quedó incompleto. Según reconstruyeron a partir de testigos, el guardia logró matar a la serpiente, aunque no está claro cómo.

Los habitantes del municipio exhibieron el cuerpo del animal como un trofeo. Nababan es reconocido como un héroe.

Fuente: Infobae